Qué cosas te gustan? Sabes que hace que te eleve el alma? Que te motiva a seguir, que te atrae, que te llena? Que acontecimientos te irritan, qué cosas te cuesta más tolerar? Cuales son tus valores y tus creencias? Que cosas te impulsan, que hace que pase el tiempo sin apenas darte cuenta? Que situaciones te provocan tristeza y a que le tenes miedo?

El autoconocimiento sirve para darnos cuenta de cómo somos para no autoengañarnos e ir como Quijotes por la vida, y tener mucho más autocontrol de nosotros mismos. El autoconocimiento es la base de la Inteligencia Emocional.

Howard Gardner, explica que la Inteligencia Emocional tiene dos vertientes:

1- La Inteligencia Intrapersonal

2- Y la Inteligencia Interpersonal.

La Inteligencia Intrapersonal es la capacidad de autoanalizarnos y entender cómo somos, cómo son nuestros procesos de pensamiento, nuestras emociones, cómo reaccionamos, cuáles son nuestros defectos y nuestras virtudes.

Y la Inteligencia Interpersonal también llamada Inteligencia Social o Relacional- es la capacidad que tenemos para entender la forma de ser de los demás, que es el fundamento de la empatía y las habilidades sociales.

Así pues, la Inteligencia Emocional es la habilidad del autocontrol de nuestras propias emociones y la habilidad de empatizar o comprender las emociones de los demás. Y la buena noticia es que el autocontrol es una habilidad que se puede entrenar, ¿cómo? pues aprendiendo a gestionar bien nuestras emociones y que no sean las emociones las que nos dominen, como muchas veces sucede.