Hace algunos años atrás leí sobre este tema y lo puse en práctica en diferentes situaciones de mi vida, y siempre quedó por ahí la inquietud de ahondar un poco más en el asunto y llevarlo cada vez más a la práctica, porque sé que de esa forma es como podemos dar mejor testimonio de algo que hemos practicado y vivido en nosotros mismos.

Hace poco terminé de leer el libro: “La Ley del Espejo”, del autor Japonés Yoshinori Noguchi. El autor narra una emotiva historia para aprender a resolver los problemas de la vida buscando dentro de uno mismo. 

Tratando de recopilar un poco más de información acerca de esta ley, empecé a buscar por otros medios de información, incluyendo internet y profesionales en el campo y de esa forma fui construyendo lo que aquí escribo y trato de explicar con base a esas lecturas e información adicional por medio de esas fuentes, entre ellas también información suministrada por la psicóloga emocional Ciara Molina.

Aquí lo que pretendo comunicar es ¿qué es la ley del espejo? y ¿cómo utilizarla para tu propia evolución?

Este escrito se divide en tres partes. Esta primera parte es a manera de introducción, la segunda – la cual se publicará en una semana – aporta una serie de ejercicios basados en las 4 situaciones posibles que el espejo nos refleja y las cuales te ayudarán a trabajar la situación reflejada según tu caso y la tercera y última parte tratará sobre el perdón, tema basado y relacionado directamente con el libro de Noguchi.

Empecemos entonces:

Qué es la Ley de Espejo?

La ley del espejo afirma que el mundo exterior actúa como un espejo para nosotros y que lo que el espejo refleja es nuestra propia luz y nuestra propia sombra. Es decir nuestro mundo interior.

Cuando logramos entender e interiorizar esta ley, automáticamente se transforma nuestra forma de ver la vida, nos damos cuenta que no somos víctimas de nada ni de nadie, solo de nosotros mismo. Que la causa de todo aquello que experimentamos y de aquello que los demás demuestran está dentro de nosotros, dentro de ti mismo. De repente tus problemas se convierte en fuente de aprendizaje, esas emociones negativas que alguien te despierta se convierten en punto clave de atención para sanar algo que necesitas sanar, para empezar a permitirte algo que tú no te estás permitiendo.

Cuando logras comprender esta ley y empiezas a aplicarla en tu vida, abres las puertas del autoconocimiento personal de par en par. Entiendes que lo que nos molesta de los demás es algo nuestro y que probablemente no lo estamos viendo o que no lo queremos ver. Y nos damos cuenta que aquello a lo que nos resistimos, persiste en nosotros. Que los demás sólo te reflejan aquello que debes sanar, permitir o liberar en ti. Y cuando lo haces, cuando sanas tu interior, como por arte de magia tu espejo empieza a reflejarte otra realidad distinta. No sólo tú te has transformado, el reflejo del espejo – tu mundo exterior – también se transforma.

Aplicar esta ley en tu vida te servirá como fuente de autoconocimiento personal, te ayudará a hacer consciente lo inconsciente, empezarás a descubrir y a sanar tu propia sombra y a liberar eso que te puede estar generando sufrimiento. Te alejarás de los extremos que hay en tu vida para dirigirte al centro, al equilibrio, a ese lugar donde encontrarás tu serenidad, tu sabiduría y tu paz interior. Te darás cuenta que tu mundo exterior tiene información muy valiosa para tu crecimiento. Que en todo aquello del exterior que quieres cambiar y aquello que te produce rechazo o rabia, en todo eso hay mucha información para tu evolución y crecimiento personal.

Como usar en tu vida la ley del espejo?

Cuando haya algo en tu vida que te detona o molesta de otra persona, algo que te produce rechazo o rabia, algo que te gustaría cambiar… toma esa información, para un segundo e imagina que pones un espejo delante de ti, observa ese espejo y pregúntate: que está reflejando este espejo de mi? Generalmente esos sucesos te van a reflejar una de las siguientes cuatro situaciones que te explicaré a continuación y tu trabajo consiste en averiguar cuál de estas situaciones está presentando tu espejo para trabajar en aquello que deberás trascender, modificar, mejorar en ti.

Situación #1: el espejo te refleja SIMILITUD, es decir, eso que te molesta del exterior no es más que un reflejo de partes que te molestan de ti mismo, es un reflejo de una parte de ti que no quieres ver, tu lado oscuro, tu propia sombra.

En este caso necesitas trabajar sobre ello y empezar a aceptar esa parte de ti y sanar aquello que necesitas sanar. Cuando lo hagas dejará de reflejarse eso en tu vida.

Situación #2: el espejo te refleja el lado OPUESTO. Son las cosas donde el espejo te está mostrando justo lo contrario de ti. Te enseña o refleja algo opuesto a lo que tú eres y precisamente por eso, al ser algo contrario a lo que tú eres, no soportas en los demás. Por ejemplo: si eres muy ordenado, no soportas que sean muy desordenados. O si eres muy generoso, a lo mejor no soportas que sean muy tacaños. A cada uno le molestará el opuesto que tenga en su interior.

Cuando esto te ocurra lo que te está reflejando tu espejo es que te estás situando en un extremo de la vida. El exterior demuestra que ningún extremo es bueno y que sólo en el centro encontramos el equilibrio. En este caso tu trabajo consistirá en la búsqueda de ese equilibrio.

Situación #3: el espejo te refleja lo que tú haces a otras personas (terceros) lo qué haces a los demás, a los otros. Son las cosas donde tu espejo te está reflejando algo que te están haciendo a ti y que tú no haces a esa misma persona, pero que sin embargo, si amplías tu visión te podrías dar cuenta que estás haciendo eso mismo a otra u otras personas. Por ejemplo es posible que en tu trabajo un compañero se esté aprovechando de ti, piensas que es injusto porque tú no haces lo mismo con él. Pero si te paras y amplias tu visión te darás cuenta que quizá estás haciendo eso a terceras personas de tu entorno: quizá a tus padres, tu pareja, un hermano.

En este caso se trata de tomar conciencia de aquello que le estás haciendo a otras personas y transformarlo y así dejará de reflejarse en tu vida.

Situación #4: el espejo te refleja tus expectativas con alguien y la auténtica realidad. A esto le llamamos IDEALIZACION.

Lo que te molesta del otro es que no sea como tú lo tienes idealizado. Quieres que esa persona o situación sea como tú quieres que sea y no como es en realidad. Disparando con ella tu necesidad de controlar y cambiar a los demás. En esta situación el aprendizaje pasa por aceptar la realidad como es y dejar de controlar y dejar de querer cambiar a las personas y aceptarlas tal y como son. No cómo te gustaría a ti que fueran.

Éstas son las cuatro situaciones que te van a reflejar tu espejo, tu trabajo es hacer consciente cuál de esas situaciones te está molestando para trabajar y transformar aquello que necesitas transformar en ti. Si no lo haces, la vida te va a seguir trayendo situaciones similares, hasta que tomes conciencia de aquello que necesitas sanar o liberar en ti.

Uno de tus grandes propósitos de vida es SER FELIZ y a través de tu auto conocimiento personal, de tomar conciencia y salir de la reacciones automáticas, de sanar heridas y reordenar tu interior, lo vas a lograr.

Recuerda: Todo cambio empieza dentro de ti!!!🦋🦋🦋

✨✨✨No te pierdas la 2da parte de este tema, donde utilizaremos papel y lápiz para trabajar en nosotros esas diferentes situaciones de vida que el espejo nos refleja de nuestro maravilloso mundo interior.